Ingredientes: 10 personas

130 grs de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente y cortada en dados

150 grs de azúcar extrafino

3 huevos grandes ligeramente batidos

2 cucharaditas de extracto de vainilla

300 grs de harina leudante

1/3 de cucharadita de sal

200 grs de nata agria

Cobertura de manzana:

3 manzanas Granny Smith, peladas, deshuesadas y cortadas en medialunas de 1,5 cm de ancho

130 grs de azúcar demerara

1 cucharada de mezcla de especias (canela, nuez moscada, pimienta de Jamaica)

Elaboración:

Precalentamos el horno a 160º con el ventilador en marcha. Engrasamos y forramos un molde redondo de 23 cm de diámetro.

En el bol de la batidora eléctrica, con la pala de amasar, mezclamos el azúcar y la mantequilla. Batimos a velocidad media hasta obtener una crema clara y esponjosa. Añadimos los huevos y la vainilla, poco a poco, hasta que se integren en la masa. Tamizamos la harina con la sal y lo añadimos a la masa en un par de tandas, alternando con la nata agria. En cuanto esté todo ligado, vertemos la masa en el molde redondo y reservamos.

Ponemos los trozos de manzana en un bol. Mezclamos el azúcar con las especias y espolvoreamos la manzana. Removemos para impregnar bien la fruta y esparcemos sobre la masa anterior. Horneamos durante 60 o 65 minutos, hasta que haya subido en torno a las medialunas de manzana y la superficie se vea crujiente, firme y dorada. Al insertar un cuchillo en la masa, no saldrá limpio porque la manzana aporta humedad, pero podremos saber si la tarta está hecha cuando, al agitar un poco el molde, no tiemble por arriba.

Sacamos del horno y dejamos reposar unos 30 minutos antes de desmoldar.

Servimos ligeramente tibia o a temperatura ambiente. Cuando cortemos la tarta usaremos un cuchillo de sierra para evitar que se desmigue.